Nada más llegar, al menos a mí, me sorprende su fachada, le da un aire de grandeza a esta finca. Cada vez que me acerco por allí rara es la vez que no hago fotos. Últimamente se ha puesto de moda para hacer reportajes de boda o comunión. Es una pena que esté abandonado.
Este palacete perteneció a la familia Carreño y fue construido entre los años 1922-1924.
Su estilo se denomina ecléctico pero se centra en el neonazarí, un estilo que predominó en la Región de Murcia a finales del siglo XIX, como por ejemplo lo podemos ver en el Casino de Murcia.
Desde allí también podemos ver el pueblo de Bullas de noche.
Fuente: Wikipedia y http://www.bullerosdemurcia.com
Fotos: PhotoVir
